Quienes cometen fraude y sus modalidades de fraude, mutan y se adaptan continuamente reformulando o redescubriendo nuevas formas de engañar a los consumidores y aprovechar indebidamente de las personas vulnerables.

No nos debe sorprender la utilización del estado de necesidad, el pánico y la incertidumbre con respecto a COVID-19 para aprovecharse de las personas y de su situación de vulnerabilidad como consumidores. A medida que se desarrolla más información sobre la pandemia de COVID-19, aumenta el número de actividades fraudulentas, incluidas las modalidades de fraude mediante donaciones a Organizaciones sin fines de lucro, Organizaciones no Gubernamentales u Organizaciones benéficas.

En estos tiempos de incertidumbre, es importante actuar con extrema precaución para evitar caer en estas modalidades de fraude y proteger tus datos personales e información bancaria. Es habitual que se utilicen determinadas técnicas como llamadas telefónicas, mensajes de texto, correos electrónicos y tácticas de puerta en puerta (en particular sobre la difusión de información relacionada con la enfermedad, campañas de vacunación antigripal, detección de la enfermedad, etcétera) para explotar los temores de los consumidores y atacar a las posibles víctimas.

También es muy importante tener cuidado con la información errónea que relacionada con el COVID-19, debiéndose confiar únicamente en los recursos e información oficial tanto desde el ámbito del Gobierno Nacional, como de los Gobiernos Provinciales y Municipales.

Aquí hay algunos ejemplos comunes de modalidades de fraude, potenciado en el marco de la emergencia sanitaria, teniendo en cuenta que no pretende ser una lista exhaustiva.


Correos electrónicos de phishing

Los correos electrónicos de suplantación de identidad relacionados con el coronavirus a menudo presentan información llamativa pero engañosa. El objetivo de estos correos electrónicos es lograr que los consumidores vulnerables divulguen información o descarguen o hagan clic en malware. Si recibe un correo electrónico sobre COVID-19 con un enlace para obtener ayuda o encontrar curas, no haga clic en la URL. Si parece ser de una fuente de confianza, visite el sitio web de esa fuente directamente.

Sitios web falsos del gobierno
Los estafadores envían mensajes por correo electrónico y mensajes de texto mientras fingen ser de fuentes gubernamentales. También están imitando o emulando sitios web del gobierno que están llenos de enlaces engañosos utilizados para cometer fraude financiero. No haga clic en enlaces en correos electrónicos o mensajes de texto, siempre verifique las fuentes del gobierno antes de proporcionar información confidencial.

Fraudes publicitarios
Muchas de las personas que diseñan estas modalidades de fraude lo hacen captando el interés de los consumidores haciéndose pasar por varias compañías y organizaciones que afirman que están ofreciendo productos y servicios falsos destinados a combatir COVID-19. Después de hacer clic en estos enlaces, se solicita a los consumidores que ingresen su información financiera. Recuerda que solamente un profesional médico puede brindarle el asesoramiento médico adecuado para COVID-19, consulte a su médico o telemedicina provincial antes de comprar cualquier cosa.


¿Cómo protegerte?

Quienes adoptan esta modalidad de fraude están utilizando la ansiedad de los consumidores en el marco de la emergencia sanitaria dictada en el marco del COVID-19 para obtener una ventaja sobra la base del estado de necesidad y ansiedad de su potencial víctima, es por ello que debemos aunar los esfuerzos para prevenir estas conductas, que muchas veces lo hacemos en forma inconsciente pero que son muy importantes. Por ejemplo:

  • Si recibes correos electrónicos sospechosos, no abras ningún enlace.
  • No proporciones información personal confidencial por correo electrónico o por mensaje de texto.
  • Monitorea las fuentes oficiales para obtener información confiable.
  • Controla regularmente tus cuentas bancarias para detectar cargos y actividades sospechosas.
  • Tener especial cuidado con los números de teléfono desconocidos.


Algunas de las modalidades de fraudes detectadas.

  • Información de investigación, salud o gobierno con datos y fuente de información no oficial.
  • Llamadas, correos electrónicos y mensajes de texto no solicitados que solicitan acciones urgentes o pagos y / u ofrecen asesoramiento médico, ayuda financiera o asistencia y compensación del gobierno, en este caso debemos tener especial consideración si no has iniciado el contacto o no sabes con quien te estás comunicando; es recomendable no responder, hacer clic en enlaces desconocidos o en archivos adjuntos sospechosos. Nunca debes brindar tu información personal, familiar o información de carácter bancaria o financiera.
  • Solicitud a través de presuntas Organizaciones no Gubernamentales benéficas no autorizadas o fraudulentas que solicitan dinero para víctimas, productos o investigación. En este caso es importante que verifiques si la misma es una persona jurídica debidamente registrada o con reconocimiento por autoridad estatal jurisdiccional competente.
  • Ofertas de dudosa procedencia, tanto quien interviene en la cadena de comercialización, como del producto que no esté autorizado por la ANMAT, por ejemplo: curas milagrosas, vacunas, pruebas rápidas

Desde las distintas organizaciones que tutelan los intereses de los consumidores en el ámbito internacional, se han detectado los siguientes actores y modalidades de fraude:

  • Compañías de préstamos y servicios financieros. Ofrecimiento de préstamos, consolidación de deudas y otros servicios de asistencia financiera.Empresas de limpieza o calefacción, ofreciendo servicios de limpieza de conductos o filtros de aire para proteger contra COVID-19.
  • Empresas de energía hidroeléctrica locales y provinciales amenazando con desconectar su poder por falta de pago.
  • Centros para el Control y Prevención de Enfermedades o la Organización Mundial de la Salud ofreciendo listas falsas para la venta de personas infectadas con COVID-19 en su vecindario
  • Agencias de Salud Pública, dando resultados falsos que dicen que ha resultado positivo para COVID-19 engañándolo para que confirme su tarjeta de salud y números de tarjeta de crédito para una receta
  • Cruz Roja y otras organizaciones benéficas conocidas, ofreciendo productos médicos gratuitos (por ejemplo, máscaras) por una donación.
  • Departamentos gubernamentales, mediante el envío de correos electrónicos de phishing con temática de coronavirus, induciendo a engaño para que abras archivos adjuntos maliciosos o mediante el ardid para que reveles detalles personales y financieros delicados.
  • Asesores financieros, a través del ofrecimiento de ayuda financiera y / o préstamos para los negocios con tasas de interés y gastos administrativos, exorbitantes y con comisiones no autorizadas.
  • Compañías privadas ofreciendo pruebas rápidas de COVID-19 para la venta. Reiteramos que sólo personal médico dependiente de los Ministerios de Salud o Secretarías de Salud (Nacional, Provincial o Municipal) pueden realizar las pruebas. Ninguna prueba es genuina ni está garantizada para proporcionar resultados precisos.
  • Venta de productos fraudulentos que dicen tratar o prevenir la enfermedad. Estos medicamentos pueden no estar aprobados, amenazan la salud pública y violan las leyes federales.
  • Ofreciendo de asistencia para completar las solicitudes de trámites ante la Administración Pública y Organismos Públicos de Asistencia Social.